Cuando por mi lado pasa
esa hermosa campesina
me sube la adrenalina
y mi cuerpo se descontrola.
Pero ella nunca anda sola,
le encanta la compañía,
la protege una jauría
de hombres sin corazón,
Que ganan su aprobación
elevando su autoestima
y cuando están en la cima
esperan su resbalón.
Visita diario el salón,
o al menos eso parece,
pues su pelo se estremece
con cada mínima brisa
Con esa bella sonrisa
pone a temblar a cualquiera
y si a mi me lo pidiera
le regalo mi pulmón.
Que divina frustración
con este amor de pradera,
yo me sé su vida entera
y ella ni sabe que existo.
By: Mike
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